Un contrato es una acuerdo entre partes legalmente vinculante. A pesar de parecer simple en la superficie, su definición está acompañada de conceptos legales que tardan tiempo en desarrollarse. Por ejemplo, el concepto de acuerdo apuntalado un contrato está evolucionando a día de hoy. Hablando de manera general, los acuerdos se pueden clasificar como “bilateral” o “unilateral”. Cuando dos partes acuerdan ciertas obligaciones contractuales, el acuerdo se considera “bilateral” y las obligaciones se pueden focalizar por la ley. Los acuerdos bilaterales son los más comunes en un contrato. Un ejemplo de acuerdo bilateral es que John acuerde vender su coche a Sara por 2000 libras, ya que de esta manera el contrato es entre dos partes, (John y Sara).
Un contrato es una acuerdo entre partes legalmente vinculante. A pesar de parecer simple en la superficie, su definición está acompañada de conceptos legales que tardan tiempo en desarrollarse. Por ejemplo, el concepto de acuerdo apuntalado un contrato está evolucionando a día de hoy. Hablando de manera general, los acuerdos se pueden clasificar como “bilateral” o “unilateral”. Cuando dos partes acuerdan ciertas obligaciones contractuales, el acuerdo se considera “bilateral” y las obligaciones se pueden focalizar por la ley. Los acuerdos bilaterales son los más comunes en un contrato. Un ejemplo de acuerdo bilateral es que John acuerde vender su coche a Sara por 2000 libras, ya que de esta manera el contrato es entre dos partes, (John y Sara).