Aunque todos los contratos son acuerdos, no todos los acuerdos son contratos. Algunos acuerdos nunca llegan a ser contratos legales por distintas razones. El sujeto de estos acuerdos puede no ser moral, estar en contra de la obligación legal, o las partes pueden expresamente no tratar su acuerdo como obligación legal; es decir, que no tienen intención de establecer un contrato. Un atributo esencial en un acuerdo contractual es que haya una “intención de contrato”.
Aunque todos los contratos son acuerdos, no todos los acuerdos son contratos. Algunos acuerdos nunca llegan a ser contratos legales por distintas razones. El sujeto de estos acuerdos puede no ser moral, estar en contra de la obligación legal, o las partes pueden expresamente no tratar su acuerdo como obligación legal; es decir, que no tienen intención de establecer un contrato. Un atributo esencial en un acuerdo contractual es que haya una “intención de contrato”.